En 2015 la empresa más poderosa del mundo permite el uso de ad blockers en sus productos, pero más importante, informa a una multitudinaria audiencia que existen esas tecnologías y pone el tema en la opinión-pública-no-solamente-nerds. Una empresa en ascenso que planea a largo plazo sobre su futuro y el de la televisión, dice “We are about flat-fee unlimited viewing commercial-free”. El gigante más grande de la publicidad en internet presenta un servicio para remover la publicidad mediante pagos, y una versión de uno de sus productos estrella, sin publicidad. Ruido sobre quitar la publicidad en la vía pública.
En las oficinas de las agencias de publicidad los Don Drapers deben estar preocupados por el futuro de su modelo de negocio.
Y sí, nos cansamos, 1915–2015, 100 años de bullshit, 100 años de interrumpir experiencias, 100 años de persuasión engañosa, 100 años de invasión de espacios públicos, 100 años de spam. Primero el papel, luego las radios, luego la vía pública, luego la televisión, luego internSTOP, Hammer Time!
Lo valioso de los ad blockers es que se abrió un nuevo diálogo sobre la ética de la publicidad, y la ética en bloquear o no la publicidad.
La deidad suprema
Ser supremo de los 100 años de bullshit, oh sí, Coca-Cola, hacedor del universo; omnipotente, omnipresente, omnisciente y personal. Una marca que logró colocarse en un pedestal imaginario con un producto perjudicial para la salud que pretende ser consumido a diario, ¡doh! Lo paradójico de este producto es que lo que lo convirtió en una amenaza a la salud pública es su publicidad, su imagen, su mundo de fantasía, su “always” cubriendo obesidad, diabetes, hipertensión y dislipidemia; su modelo de negocio.
Los sentimientos de felicidad que provocan ese rojo y negro son consecuencias de la ubicuidad e insistencia durante generaciones, hasta se hace difícil de juzgar y condenar a este producto, el yin y el yang, el balance perfecto, el sí pero no, lo que está mal pero no tanto, es el ¯\_(ツ)_/¯ más grande del consumidor, la mentira más extensa y solapada de la historia de publicidad, lo que el alcohol y el tabaco no pudieron hacer al 100%, el ejemplo que abarca todo lo que está mal en el modelo, son los 100 años de bullshit es su máxima expresión.
Horas de creatividad en agencias, horas de aplausos en festivales, horas de ser tomada como caso de éxito en universidades. Horas de bullshit.
Coca-Cola en 10 años va a ser los cigarrillos de hoy.
Publicidad a demanda
¿Qué van a hacer?, difícil de predecir, pero se van a tener que reinventar, tal vez, seguir el camino del on-demand.
<redactar bien>
La gente si quiere tomar decisiones sobre productos y servicios a consumir VA A IR a un catálogo de publicidad, a un producto, a un lugar determinado, VA A OPTAR por que aparezcan publicidades en determinados lugares y ahí sí, que le muestren boludeces audiovisuales, historias, ficción, conceptos intangibles etc pensados para el público objetivo bla bla marketing y a su vez características, comparativas, razones de consumo, etc más tangibles. básicamente un Amazon pero con audiovisual, entretenimiento, persuasión. En el momento adecuado, no interrumpiendo, eso va a oblifar a los anunciantes a cortar el bullshit porque el consumidor va a ir a buscar la publicidad, no la publicidad va a ir al consumidor a la fuerza. Elevará el status de la publicidad y sdu ética.
</redactar bien>
* Un saludo al 10% que no es bullshit y se enoja ocn las generalizaciones.
** ≈ 100.
*** Artículo incompleto que estaba en el cajón y que vio la luz dado el aumento de ejemplos de tendencias a agregar al primer párrafo.
**** No soy marketer, publicista, nutricionista, whatever; simplemente un pelotudo que observa tendencias y traza opiniones.